Cardenal Sarah: “No a la autodestrucción de la Iglesia"

Fuente: FSSPX Actualidad

Cardenal Robert Sarah.

El Cardenal Sarah rompe el silencio y señala a aquellos que intentan "fragmentar y destruir el sagrado Missale Romanum."

"La crisis tan grave de la fe, no solamente al nivel de los fieles cristianos sino también, y específicamente, entre los muchos sacerdotes y obispos, nos ha vuelto incapaces de comprender la liturgia Eucarística como un sacrificio." Esta severa observación no sólo ha sido hecha por Monseñor Lefebvre, ni por alguno de sus sucesores en el episcopado, sino por el Cardenal Robert Sarah, Prefecto de la Congregación para el Culto Divino, en otras palabras, una de las autoridades litúrgicas más importantes en la jerarquía católica.

El prelado guineano aprovechó la XVIII Reunión Litúrgica, celebrada en Colonia a principios de abril, para transmitir un mensaje contundente sobre el tema: "Motu Proprio Summorum Pontificum. La Fuente del Futuro." Haciendo eco de una idea de la que Monseñor Lefebvre habló varias veces, el Cardenal Sarah declaró que, efectivamente, existe una "crisis en la Iglesia" y que esta "crisis es debida en gran parte a la desintegración de la liturgia."

Un poco más adelante, el prelado citó palabra por palabra el pasaje de L’hérésie du XXème siècle (La Herejía del Siglo XX), por Jean Madiran - un antiguo compañero de lucha de la Fraternidad hasta las consagraciones en 1988 - en el cual insistía en que las causas de la "guerra litúrgica" comenzaron en la década de los sesentas.

Su postura difiere de la mantenida por la Fraternidad Sacerdotal San Pío X en lo tocante a las causas de esta devastación litúrgica: Aunque el Cardenal Sarah reconoce lúcidamente "las manifestaciones críticas y las guerras litúrgicas ocasionadas por el Concilio Vaticano II", parece ser que las ve más como una desviación post-conciliar generalizada que como una ambigüedad en los textos del Concilio mismo.

Sin embargo, la sentencia del prelado guineano es implacable: "Muchos se niegan a hacer frente a la obra de autodestrucción de la Iglesia a través de la demolición liberada de sus cimientos doctrinales, litúrgicos, morales y pastorales." Y llega incluso hasta el punto de elogiar el missal de San Pío V, "que produjo tantos santos", citando textualmente sus palabras.

La postura del Cardenal Sarah es todo menos irrelevante: hace varios meses, la Congregación para el Culto Divino fue reorganizada, y sus miembros más tradicionales tuvieron que ceder su lugar a hombres involucrados en la promoción del espíritu post-conciliar denunciado por el Cardenal Sarah: para citar el ejemplo mejor conocido, el arzobispo Piero Marini, un seguidor del arzobispo Bugnini - artífice de la Nueva Misa - tomó el lugar del Cardenal Burke.

Estas declaraciones escritas por el Cardenal Sarah son su primera postura desde que fuera aislado dentro de la congregación de la cual es prefecto. La pregunta ahora es si esto es una clara señal para el cardenal de llevar la lucha a un nivel superior, o si sólo se trata de su toque de retirada. El futuro nos lo dirá.

Fuentes: L’homme nouveau/FSSPX.Actualités – 4/20/17