El escapulario marrón y la Virgen de Fátima

Fuente: Distrito de México

El escapulario marrón le fue dado a San Simón Stock, un monje carmelita, en 1253. ¿Qué tiene ver con Nuestra Señora de Fátima?

Al acercarnos al 100 aniversario de las apariciones de la Virgen de Fátima, presentamos este artículo, originalmente publicado en la revista The Angelus, acerca del interesante mensaje que Nuestra Señora les dio a los tres pastorcitos.

El escapulario

Angelus Press: julio, 1990

HISTORIA Y PROMESAS

Durante su aparición en Fátima del 13 de octubre de1917, la Santísima Virgen sostenía en su mano un escapulario marrón a la vez que se presentó como Nuestra Señora del Monte Carmelo. Cuando se le preguntó a Sor Lucía por qué Nuestra Señora sostenía el escapulario, ésta respondió: “porque quiere que todos lo usen… pues es el signo de nuestra consagración a su Corazón Inmaculado.”

El escapulario marrón que la gente usa hoy en día, es una miniatura del escapulario de gran tamaño que forma parte del hábito carmelita. En el año 1253, un escapulario más grande fue dado por Nuestra Señora a San Simón Stock, general de la orden carmelita. Durante esta aparición, la Santísima Virgen le prometió lo siguiente:

Este será un privilegio para ti y todos los carmelitas: cualquiera que muera revestido con esta tela no sufrirá el fuego eterno; y si al momento de su muerte lo llevan puesto, serán salvados.”

EL PRIVILEGIO SABATINO

Durante otra aparición, esta vez al Papa Juan XXII (1316 – 1344), la Santísima Virgen concedió generosamente lo que se conoce como el Privilegio Sabatino: todos aquellos que cumplan ciertas condiciones serán librados del purgatorio el primer sábado después de su muerte. Esta promesa también se mencionó en una bula promulgada el 3 de marzo de 1322 por el Papa Juan XXII. Fue el Papa Pío V (1605 – 1621) quien solucionó la controversia acerca de dicho priviliegio, cuando emitió una declaración oficial en la que otorgaba permiso a los sacerdotes para predicar que la Santísima Virgen del Monte Carmelo:

… auxiliará a las almas de los Hermanos y Hermanas de la Cofradía de la Santísima Virgen del Monte Carmelo, luego de su muerte, con su continua intercesión a través de sus sufragios y méritos y su especial protección, especialmente en día sábado, el cual es el día dedicado de manera especial a la Santísima Virgen María por la Iglesia…”

Para recibir los privilegios del escapulario se debe estar inscrito en el escapulario marrón. Hay que pedir al sacerdote llevar a cabo dicha inscripción.

Las condiciones para obtener el Privilegio Sabatino son:

1. Usar el Escapulario Marrón devotamente.

2. Guardar castidad según el estado de vida que se tenga.

3. Rezar el Oficio parvo de la Santísima Virgen María diariamente o, con el permiso de un sacerdote, sustituirlo por otra obra piadosa, por ejemplo: el rezo diario de las cinco decenas del rosario.

Cualquier sacerdote facultado para escuchar confesiones (esto incluye a la mayoría de los sacerdotes) tiene el poder para conmutar (cambiar) este tercer requerimiento.

Fuente: District of the USA