La prudencia en el habla - Palabras de Mons. Lefebvre
He aquí unas palabras de Monseñor Marcel Lefebvre, fundador de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X. "Hay que tener mucho cuidado y ser muy prudentes antes de afirmar algo. A los que hablan de ese modo les falta el espíritu de caridad, y por consecuencia, el realismo. Son idealistas y razonadores especulativos."
La dureza es mala consejera. Siempre saca conclusiones exageradas de cualquier cosa que se dice. Siempre interpreta las palabras de los demás en su sentido más duro. Por ejemplo, hay personas que dicen: “El Papa ha dicho tal cosa, por lo tanto es un hereje, y por lo tanto ya no es Papa…” Ese es un razonamiento simplista; basta sacar una frase de su contexto para concluir: “Es un hereje”.
Para ser hereje hay que ser pertinaz en el error y no basta con haber pronunciado una frase herética. Por ejemplo, sobre el tema de la Santísima Trinidad -tema que es muy difícil- todos nosotros podemos equivocarnos, expresándonos incorrectamente y decir algo que no sea muy ortodoxo. Si alguien nos lo señala, lo corregimos. ¡Pero qué horrible sería si alguien nos acusase en seguida de herejía y excomunión!
Algunos no dudan en sacar conclusiones increíbles: “Ese ha dicho tal frase, así que es un liberal, seguro que es un masón; por lo tanto está excomulgado…” ¡Con semejantes razonamientos todo el mundo sería masón!
Es muy peligroso dejarse llevar por conclusiones precipitadas. Respecto al Papa, a veces se oye decir: “Firmó el documento sobre la libertad religiosa y ese decreto es herético, así que el Papa es un hereje y ya no es Papa…” En primer lugar se tendría que estudiar de una manera muy exacta si ese documento es herético; después preguntarse si el Papa era perfectamente consciente de lo que firmaba. Se sabe que él mismo hizo añadir algunas frasecitas para decir: “El decreto de la libertad religiosa es conforme a la Tradición.” Por supuesto que eso no es cierto, pero él lo creía así en su pensamiento. Así que no se puede concluir con demasiada rapidez, porque las consecuencias serían demasiado graves.
Algunos dicen: “No hay Papa”. De modo que los cardenales que ha nombrado no son tales, y cuando estos mismo elijan un nuevo Papa, no lo será porque los cardenales no lo son en realidad…. ¿Hasta dónde van a parar? ¿Quién va a nombrar al próximo Papa? ¿La Providencia? Sí, pero la Providencia emplea a los hombres. Es meterse en un agujero negro. Ahí es donde vienen a parar las conclusiones precipitadas.
Cómo no extrañarnos de que los fieles vayan a otras partes. Se les empujó a buscar una autoridad y terminan en las sectas, rompiendo completamente con la Iglesia.
Hay que tener mucho cuidado y ser muy prudentes antes de afirmar algo. A los que hablan de ese modo les falta el espíritu de caridad, y por consecuencia, el realismo. Son idealistas y razonadores especulativos.
Monseñor Marcel Lefebvre
Fuente: Soy yo el acusado, quien tendría que juzgaros