Los religiosos de Bélgica dicen "Sí" a la eutanasia

Fuente: FSSPX Actualidad

Procesión de los Hermanos de la Caridad en Roma. A la derecha, el Hermano René Stockman.

El Superior General de los Hermanos de la Caridad ha condenado la postura de la filial belga de su congregación, que autoriza la eutanasia activa bajo ciertas condiciones para pacientes que radiquen en sus hospitales psiquiátricos.

Los Hermanos de la Caridad son una congregación masculina de derecho pontificio dedicada al cuidado de los enfermos. Fundada en Ghentin, en 1807, por el clérigo Peter Joseph Triest, la congregación está inspirada en la espiritualidad de San Vicente de Paul hacia los pobres. Están activos en 20 países distintos, educando a los jóvenes y cuidando a los discapacitados y a los enfermos mentales. El 26 de abril del 2017, el periódico católico de Flandes Tertio reveló que la congregación belga de los Hermanos de la Caridad había decidido que la eutanasia activa podría practicarse en los dos centros psiquiátricos que dirigen en Bélgica, no sólo para aquellos pacientes en etapas terminales que así lo soliciten, sino también en casos de trastornos psicológicos graves.

En una carta dirigida al consejo y al equipo médico de los centros psiquiátricos de Dave (Namur) y Manage (Wallonia) se explica que el Consejo General de los Hermanos de la Caridad en Roma, dirigido por el belga René Stockman, Superior General, no está de acuerdo con este cambio.

Efetivamente, el Hermano René Stockman se pronunció vigorosamente en contra de esta postura:

Esta decisión es incompatible con los puntos de vista de nuestra congregación. Ciertamente no es la visión de los Hermanos de la Caridad. El respeto a la integridad del ser humano es de vital importancia; consideramos la inviolabilidad de la vida como algo absoluto. La organización de Bélgica se ha desviado de este principio fundamental.

El Superior General de los Hermanos de la Caridad considera esta postura de la filial de su orden en Bélgica como el "resultado de la profunda secularización en Bélgica y Flandes. Yo soy de Flandes," recuerda, "pero no he trabajado en Bélgica desde el año 2000. Desde entonces, he observado muchos cambios. Nos permitimos quedar atrapados en la tendencia de la secularización. En el texto no se hace ninguna referencia a Dios, a la Biblia o a la visión cristiana del hombre. Es una visión completamente secular."

En una entrevista concedida a Katholiek Nieuwsbald, recordó que el papel de la psiquiatría es ayudar a las personas que padecen de trastornos psicológicos, no acabar con sus vidas.

El Hermano Stockman también mencionó lo que el Obispo de Amberes, Monseñor Johan Bonny, dijo después de la publicación del documento. El prelado declaró que no había leído detenidamente el texto de los Hermanos de la provincia belga, pero que parecía estar "equilibrado en su mayoría."

Monseñor Bonny fue todavía más lejos, añadiendo que "en cuestiones de ética, es difícil alinear a todos alrededor del mundo en las mismas posturas. Las culturas y mentalidades en las distintas congregaciones, pero también en la Iglesia misma, son muy distintas." Resulta difícil hacer una defensa más clara que ésta de la ética circunstancial, misma que la Iglesia siempre ha condenado. "¿Acaso el quinto mandamiento de Dios "No Matarás" es flexible?

Esto no pasó desapercibido al Reverendo Hermano Stockman, quien declaró que Monseñor Bonny estaba expresando una opinión personal. Una expresión bastante cuestionable: "No es correcto que un obispo haga una declaración de ese tipo sin siquiera haber leído antes todo el texto, e independientemente de las decisiones de las conferencias episcopales sobre la cuestión. Es algo que me molesta mucho. De hecho, lo que dice es que la eutanasia debería ser posible. De verdad me molesta enormemente. Debería darse cuenta que está hablando como obispo."

El problema es que el obispo de Amberes, nombrado en el 2008 por Benedicto XVI, es conocido por sus posturas progresistas, especialmente sobre temas morales. Durante la primera sesión del Sínodo sobre la Familia, en el 2014, aconsejó a la Iglesia reconocer formalmente las relaciones de las "parejas bisexuales y homosexuales" abriéndose a lo que "la gente de hoy piensa o siente." Un año después, durante la segunda sesión, se ofreció a elaborar nuevos rituales para bendecir las uniones de las personas que vivieran juntas, ya fuera como concubinos, divorciados vueltos a casar o personas del mismo sexo. También aconsejó ofrecer acceso personalizado a la comunión eucarística a los divorciados y vueltos a casar. 

En opinión del Superior General de los Hermanos de la Caridad, las cosas no se van a quedar así: "Estamos consultando con la Conferencia Episcopal de Bélgica," explicó. "Es responsabilidad de ellos adoptar una postura y hacer una declaración sobre este asunto. También me he puesto en contacto con una autoridad de alto rango en el Vaticano. Le he explicado la situación claramente."

Sólo podemos esperar que las autoridades romanas apoyen clara y firmemente al Reverendo Hermano Stockman en su defensa del derecho a la vida de todos los individuos, desde el momento de la concepción hasta la muerte. "Cuanto hiciereis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí me lo hiciste" (Mt. 25:40).

Fuentes: InfoCatho - Belgicatho - Lalibre.be / FSSPX.News - 05/06/2017