Lutero, el enemigo de la gracia de JC - el destructor de la cristiandad
Con ocasión de los 500 años de la Reforma Protestante, he aquí el quinto artículo de nuestra serie "Lutero, el enemigo de Jesucristo". El tema que trataremos en este número será: Lutero, el destructor de la cristiandad, tomando este término en el más amplio sentido.
En unos meses, seremos testigos de una avalancha de conmemoraciones y exaltaciones hacia Lutero, con el motivo de los 500 años de la publicación que hizo en una iglesia en Wittenberg, de sus 95 tesis, las cuales se consideran el principio de la pretendida “Reforma”. Y, desafortunadamente, la jerarquía eclesiástica, incluyendo al mismísimo Papa, va a tomar una importante parte en este escandaloso concierto de alabanzas.
Martín Lutero fue excomulgado el 15 de junio de 1520 por la bula Exurge Domine del papa León X. Ciertamente, este último, no fue un papa ejemplar, pero en este caso y, contrariamente a sus actuales sucesores, hizo lo que debía hacer y trató de exterminar aquello que se convertiría en una de las más grandes catástrofes de la historia de la humanidad.
De Lutero, podemos decir, en resumen, que fue el destructor de la cristiandad, tomando este término en el más amplio sentido.
Empezando porque la pretendida “Reforma” arruinó definitivamente la unidad moral de la Europa cristiana. Ciertamente, existían guerras y conflictos, pero todos comulgaban en la única fe católica, todos reconocían al Papa como el Vicario de Cristo y último árbitro de las naciones. A partir del siglo XVI, por el contrario, las naciones europeas se separaron por la religión con esta oposición; especialmente Europa latina del Sur, de cultura católica, y Europa germánica del norte, de cultura protestante.