Miércoles de Pasión - textos litúrgicos
El Evangelio de hoy nos habla sobre la obstinación de los judíos en rechazar a Jesús. El Sanhedrín odiaba a Nuestro Señor y procuraba apedrearlo. Los judíos, rechazando al Pastor de sus almas, ya no son más sus ovejas. Son ahora los gentiles - bautizados o reconciliados con Dios en la fiesta de la Pascua - las ovejas que escuchan su voz y a quienes Jesucristo les da su vida eterna. ¡Dichosas ovejas!
En Roma se celebra la Estación en la Iglesia de San Marcelo papa y mártir (308-310).
COLECTA
Santificado este ayuno, ilustra, oh Dios, misericordiosamente los corazones de tus fieles: y escucha benigno las súplicas de aquellos a quienes concedes el sentimiento de la devoción. Por el Señor.
EPÍSTOLA
Lección del Libro Levítico.
En aquellos días habló el Señor a Moisés, diciendo: Habla a toda la asamblea de los hijos de Israel, y les dirás: Yo soy el Señor, vuestro Dios. No hurtaréis. No mentiréis, ni engañará cada cual a su prójimo. No perjurarás en nombre mío, ni mancharás el nombre de tu Dios. Yo soy el Señor. No calumniarás a tu prójimo, ni le oprimirás con la fuerza. No retendrás el salario del obrero hasta el mañana. No maldecirás al sordo, ni pondrás tropiezo delante del ciego: sino que temerás al Señor, tu Dios, porque yo soy el Señor. No harás lo que es inicuo, ni juzgarás injustamente. No consideres la persona del pobre, ni honres la cara del poderoso. Juzga justamente a tu prójimo. No serás calumniador, ni murmurador en el pueblo. No te pondrás contra la sangre de tu prójimo. Yo soy el Señor. No odies a tu hermano en tu corazón, sino corrígele públicamente, para que no peques contra él. No busques la venganza, ni te acuerdes de la injuria de tus ciudadanos. Amarás a tu amigo como a ti mismo. Yo soy el Señor. Guardad mis leyes. Porque yo soy el Señor, vuestro Dios.