El Papa cambia el lavatorio del Jueves Santo

Fuente: Distrito de México

Se le había criticado por incluir a mujeres en el rito celebrado por él, contra lo que prescriben las rúbricas. El Papa lo soluciona cambiando las rúbricas.

En las últimas celebraciones del Jueves Santo, Francisco había sorprendido incluyendo a algunas mujeres entre los doce “apóstoles” a quienes se lavan simbólicamente los pies repitiendo el gesto de Nuestro Señor en la Última Cena. El Papa había recibido algunas críticas por actuar, en un acto de tanta repercusión mediática, contra rúbricas cuyo cumplimiento impone la misma Santa Sede. En efecto, el Missale Romanum prescribe que sean “hombres” los “elegidos” para ese rito.

Este 21 de enero la Congregación para el Culto Divino y la Doctrina de los Sacramentos dio a conocer la carta que el Papa dirigió con fecha 20 de diciembre de 2014 a su prefecto, el cardenal Robert Sarah, modificando esa norma litúrgica (obviamente, sólo para la Nueva Misa). A partir de ahora, donde decía “los hombres elegidos” la norma dirá “los elegidos entre el Pueblo de Dios”: “Ese grupo puede estar formado por hombres y mujeres y, convenientemente, por jóvenes y ancianos, sanos y enfermos, clérigos, consagrados, laicos”. El decreto correspondiente de la Congregación lleva fecha de 6 de enero.

El próximo Jueves Santo, pues, ya no se podrá decir que el Papa viola sus propias normas. Sin embargo, algunas perplejidades seguirán en pie.

Primera, que la anterior norma no era “negativa” en el sentido de excluir a las mujeres, era “positiva” en el sentido de incluir hombres, porque esos hombres representan en la ceremonia a los doce apóstoles en un contexto tan eminentemente sacerdotal como es la Última Cena. Por tanto, extender la rúbrica a las mujeres, más allá de las razones de inconveniencia que pudieran alegarse, o bien diluye ese contexto sacerdotal o bien diluye la exigencia divina de que el sacerdote, “otro Cristo”, sea varón.

Y segunda, que ha habido ocasiones en estos años en los que Francisco ha incluido a no cristianos (como una reclusa musulmana en 2013) entre las personas a quienes lavó los pies. La nueva rúbrica habla de que podrán ser escogidos miembros del “Pueblo de Dios”. Ahora bien, como parece que este nuevo cambio es consecuencia de una preferencia personal del Papa, cabe preguntarse si el concepto de Pueblo de Dios (que la eclesiología conciliar identifica con la Iglesia) incluye también a esos no cristianos, en cuyo caso las fronteras entre la Iglesia y el mundo se diluirían por completo. Habrá que esperar al próximo Jueves Santo para salir de dudas.